EL LEÓN Y EL CIERVO
Estaba un león muy furioso, rugiendo y gritando sin ninguna razón. Lo vio un ciervo a prudente distancia y exclamó:
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¡Desdichados de nosotros, los demás animales del bosque, si cuando el
león estaba sosegado nos era tan insoportable, ¿de qué no será capaz
estando en la forma que está ahora?
Moraleja: Cuidémonos de no
dar nunca poder a los irascibles y dañinos, pues si ya sin motivo nos
dañan, más lo harán si por cualquier causa se sienten inconformes.
Autor del cuento: Esopo