Respuesta :

El primer discurso es el de Fedro quien señala que Eros, el dios del amor, es la divinidad más antigua. Eros, según él, hace que los hombres sientan vergüenza y ambición, además, que el influjo de éste en los hombres es mayor que cualquier otro sentimiento, ya que su poder impulsa a grandes acciones, como cuando el amante muere por su amado. En su presencia los amantes se abstienen necesariamente de toda vileza y cobardía. En suma, Eros es una fuerza inspiradora de acciones elevadas.

El segundo discurso corresponde a Pausanias, quien distingue entre dos tipos de Eros, cada uno de los cuales sigue a una Afrodita distinta: Afrodita Pandemos y Afrodita Celestial. El Eros de Afrodita Pandemos, es el de aquellos hombres que aman lo corporal y que buscan lograr sus fines sin interesarse en el proceso. El Eros de Afrodita Celestial es propio de hombres que buscan la perfección moral. Quien está bajo el influjo de este Eros, busca una relación permanente para la educación física y la filosofía así como educar a su amado en la sabiduría y el valor.

Esta distinción entre los dos Eros demuestra que este discurso está pronunciado con un discernimiento más profundo y con una conciencia más elevada que la del primer discurso.

El tercer discurso es del médico Erixímaco quien -aceptando la distinción de Pausanias- sostiene que no sólo los hombres poseen un doble Eros, sino todas las cosas. Basándose en la medicina, Erixímaco señala que los cuerpos poseen este doble Eros o deseo y que es justo consentir a los buenos deseos que se identifican con el amor denominado celeste. Según Erixímaco es labor del profesional médico saber cuáles son dichos buenos deseos. Asimismo, para otorgar un mejor orden a las cosas -desde lo humano y lo divino hasta las estaciones y los climas- debemos estimular los deseos que nos conducen a la piedad y a la justicia. Doquiera que hay armonía y ritmo cabe hablar de la presencia del amor. Tal es -grosso modo- la interpretación que Erixímaco hace de Eros. En ella el significado de Eros resulta ampliado al identificárselo con una fuerza universal de la naturaleza. Ciertamente el discurso de Erixímaco es más profundo que los anteriores, aunque peque de algún grado de arrogancia profesional.