Respuesta :

GOBIERNOS PROTECCIONISTAS.

La primera guerra mundial y los gobiernos:

Existen muchas interpretaciones sobre la primera guerra mundial, pero lo que no cabe duda es que fue un conflicto entre las grandes potencias industriales de la época; entre los grandes imperios. 

Oficialmente la causa de la guerra se establece en el Tratado de Versalles, como la voluntad de guerra de Alemania, que quiere imponer su hegemonía en Europa. Sin embargo la realidad es otra. Las economías europeas están en plena expansión y sus intereses chocan en las diferentes colonias. 

La guerra 

La primera guerra mundial es una contienda muy larga, y es un conflicto moderno, que necesita movilizar a todo un país, para poder ganarla. Como todas las guerras nacen con pretensiones de ser una guerra corta, pero nadie es capaz de asegurar sus avances y poco a poco se convierte en una guerra de trincheras, una guerra estática que pretende durar. Se pone sitio a un país. 

Se enfrentan los dos grandes sistemas de alianzas de la época, la Triple Alianza, con Alemania y Austria-Hungría (Italia permanece neutral); y la Entente Cordial: Francia, Rusia e Inglaterra, además de Bélgica atacada por Alemania y Servia atacada por Austria-Hungría. Posteriormente junto a la Triple Alianza se incorporan Turquía (1914) y Bulgaria (1915); y junto a la Entente Cordial se incorporan Japón (1914), Italia (1915), Montenegro (1915), Rumania (1916), Portugal (1916), Grecia (1917) y Estados Unidos (1917). En Europa quedan al margen de la guerra España, Holanda, Dinamarca, Noruega, Suecia, Suiza y Albania. 

La extensión geográfica de la guerra es desmesurada. Todas las grandes potencias entran en el conflicto, así como numerosos pequeños países con capacidad para abrir líneas de fuego que aseguraran la comunicación entre los frentes de los aliados. La guerra se extiende también a las colonias. 

Japón entra en la guerra contra Alemania en 1914. Se apodera de su imperio colonial asiático. EE UU entra en guerra (1917), para tomar parte en el reparto y las conversaciones de paz. 

La larga duración de la guerra implica la necesidad de reclutar cada vez un mayor número de tropas, lo que termina por afectar a una cantidad ingente de combatientes: millones de personas. Es una guerra cara, mueve mucho capital. Las fábricas se dedican a la producción de armamento, y la economía se vuelve una economía de guerra. El armamento se va sofisticando durante la guerra y aparecen nuevas armas y nuevos métodos de hacer la guerra: como la aviación, el submarino o la guerra química. 

En 1917 en Rusia se produce una revolución y el país sale de la guerra, con la paz de Brest-Litov. 

Consecuencias de la guerra 

Después de la guerra el mundo ha cambiado radicalmente. Desaparecen cuatro imperios: Rusia, Alemania, Austria-Hungría y el otomano. Aparecen muchos pequeños países: como los países bálticos, los Balcanes o Yugoslavia, crecen muchos países nacionalistas como Hungría, Polonia y Checoslovaquia. 

La paz no se firma en un tratado único, sino que se negocia una serie de ellos que tienen lugar en torno a París, y que se alargan mucho en el tiempo, algunos entran en vigor en 1920. 

Las ideologías triunfantes en la guerra son el liberalismo democrático y el nacionalismo separatista, que obtiene unas bases territoriales en sus países, y se afianza ideológicamente. La guerra supone el fin de la diplomacia secreta, y se crea la Sociedad de Naciones para regular las relaciones internacionales. 

Las pérdidas humanas en la guerra son impresionantes, unos nueve millones de personas: unas cifras que angustian a muchos intelectuales y artistas, que toman partido por las actitudes pacifistas. 

Las pérdidas económicas directas son también enormes. El Estado asume las cargas que suponen los numerosos excombatientes. Pero mayores son las cargas económicas que tienen los vencidos, que han de pagar los gastos de la guerra. Por último, EE UU se revela como una gran potencia mundial imperialista. 

El mundo de la posguerra 

Al terminar la guerra se tiene una sensación de euforia, de equilibrio y triunfo perpetuo. Las economías de los países que han estado en guerra se reconstruye rápidamente. 

Sin embargo, no todos los conflictos internacionales quedaron resueltos. Turquía pretende reconstruir su imperio. Alemania se siente agraviada por las numerosas pérdidas territoriales. Los conflictos entre Italia y Yugoslavia son graves. Irlanda se independiza después de una guerra, entre 1919 y 1923. 

La revolución soviética se convierte en una guerra civil con implicaciones de otros países. La gran burguesía tiene miedo y apoya a los grupos antiobreros violentos, que terminan formando el fascismo. En muchos de los países se instalan dictaduras militares y fascistas, durante los años veinte. 

La crisis de 1929