Respuesta :

Pérdida de fertilidad y erosión de los suelos, causadas por la excesiva explotación a que están siendo sometidos: la utilización de alarmantes dosis de abonos químicos, que ha hecho olvidar el papel fundamental de las aportaciones orgánicas; ha dado lugar a un empobrecimiento de las tierras en humus que afecta a su fertilidad, mullimiento, vida microbiana, estabilidad estructural etc.
prácticas habituales como la quema de rastrojos han producido y producen impactos duraderos e irreversibles, como la destrucción de la materia orgánica y la microestructura del suelo, y la erosión y la pérdida de fertilidad
la agricultura tiene la enorme desventaja que produce la erosión de los suelos desde el momento que elimina o reduce la protección vegetal de los mismos y permite que éstos se mantengan desnudos por largos periodos de tiempo, en ocasiones coincidiendo con la máxima virulencia de los agentes erosivos. Y por otra parte, el material erosionado contiene una particular riqueza frente al que queda. Contiene aquél 21 veces más materia orgánica, 2,7 veces más nitrogeno, 3,5 veces más fósforo asimilable y 19,3 veces más potasio intercambiable.
Debido al empleo indiscriminado de fertilizantes y todo tipo de productos químicos se presentan los siguientes problemas en las aguas tanto superficiales como subterraneas:
- Acumulación de nitritos y fosfatos, que se traduce en una pérdida de la potabilidad.
- Eutrofización de las aguas continentales y mares costeros, al aumentar hasta niveles nocivos los productos orgánicos e inorgánicos derivados de aguas residuales y fertilizantes agrícolas, originando graves cambios en las características del medio y desoxigenación de las aguas profundas.
- Salinización de los acuíferos por sobreexplotación de las aguas subterráneas.
Toda esta problemática se extiende a los suelos de uso agrícola, ya que si las aguas están contaminadas, y las empleamos para el riego, terminaremos por contaminar también el suelo de cultivo.