Respuesta :

En primer lugar, está la ubicación. Sólo el 15% de rocas cumplen con las condiciones idóneas para conservar fósiles. Se tiene que acabar enterrado en un sedimento en el que poder dejar una impresión. Además, no podemos acabar expuestos al oxígeno, para lograr así que las moléculas de nuestros huesos y algunas otras partes sean sustituidas por minerales disueltos, con lo que tendremos creada nuestra copia.