Respuesta :


 

Alfonso VI se libró de la muerte debido a las precauciones que tomó en este episodio de su vida. El Cid se entera de la traición y corre en ayuda de su rey. Alfonso agradecido le ordena regrese a Castilla con él.

El Cid lo acompaña, pero al no llegar a un acuerdo sobre su nueva incorporación a las huestes Castellanas, a mitad de camino regresa a Zaragoza.

Sin embargo se produce un importante cambio en la situación del Cid, ahora ya no es un desterrado, sino un Capitán de Castilla que alquila sus servicios (en este caso al rey Mutamin de Zaragoza).

De nuevo al mando de Mutamin, este le ordena saquear Aragón. Y así lo hace durante cinco días, donde la expedición de castigo consiguió un gran botín, sin oposición alguna del rey Sancho de Aragón.

La siguiente campaña que ordena Mutamin al Cid es contra su hermano Alfagit, rey de Denia, hasta llegar a Morella, donde después de destruir el castillo, el Cid reconstruye otro, por orden de Mutamin, de nombre Alolala.


1088: El Cid en Levante

A mediados de 1088, el rey moro de Lérida, Denia y Tortosa cerca Valencia con ayuda de los condes de Barcelona. Alcadir, rey de Valencia solicita el auxilio de Alfonso VI, y del rey moro de Zaragoza. Alfonso VI envía al Cid y sus huestes hacia Levante.

El Cid unió a sus fuerzas, al rey Mostain de Zaragoza y su ejército y partió para Valencia donde los catalanes y el rey moro de Denia huyeron.

Debilitada Valencia por el sitio, y con gran cantidad de tropas en las puertas de la ciudad, Mostain, rey de Zaragoza, quiso tomar para sí la ciudad. Pero el Cid se lo impidió alegando que Valencia era de Alcadir gracias a Alfonso VI, y Valencia era por tanto de este.