BIOGRAFIA:
Poeta y escritor peruano, nació en Chames, Chota, Cajamarca. Estudió Secundaria
en el Colegio Nacional "San Juan" de Chota y Letras y
Educación en la Universidad Nacional de Trujillo. Ejerció la
docencia en el CEP "Bolognesi" de Trujillo, en el Colegio
Nacional "San José" de Chiclayo y como Catedrático en la Universidad Nacional
“Pedro Ruiz Gallo" de Lambayeque. Obtuvo el Primer Puesto en los Juegos
Florales de Radio "Délcar" de 1971. El Primer Premio en los Juegos
Florales de la Unión de Escritores y Artistas de Lambayeque (UNEAL)
de 1983.
PERSONAJES:
*Grimaldino
Carhuapoma
*Luzdema
Arendles
*Dalila
Leredina
*Capitán
braca monte
*Rodolfo
Santilamay
*Eliedor Saya verde
RESUMEN:
Un terreno donde se sembraba arroz había sido invadido por muchas familias entre
ellas la de Grimaldino Carhuapoma (estudiante de Derecho), su esposa Luzdena
Arenales (estudiante de Enfermería) y su hija Dalila.
Dicho lugar estaba impedido de ser urbanizado y las familias sabían que
tarde o temprano serían desalojados. Cuando se produjo el desalojo, en pleno
enfrentamiento, un guardia fue asesinado por su jefe inmediato, por desobedecer
sus órdenes.
Del tal crimen fueron inculpados y llevados a la cárcel algunos invasores;
entre ellos Grimaldino.
La municipalidad, para evitar que los invasores sigan paseando, a los
fallecidos en la reyerta, por las calles de Concochinan les ofreció un lugar
fuera de la ciudad para que pudieran habitarlo.
Era un basural. Hombres y mujeres, trabajaron muy duro para
limpiarlo y poder construir sus casas. El nuevolugar fue llamado Pueblo
Naciente, allí las familias vivían en condiciones infrahumanas.
Cuando Grimaldino abandonó la cárcel se dedicó a cortar cabello. Salía
con sus tijeras y su Código Penal para llevar a casa algo de dinero. Pues
Luzdena Arenales había de darle una nueva niña, a quien llamaron Loredina.
Esta niña murió por falta de defensas en su organismo. Grimaldino antes que
muera su hija se había endeudado por un lado y otro.
Las deudas lo atosigaban hasta que una noche salió despavorido gritando
“¡Quiero un empleo! ¡Quiero un empleo!”. Con él llevó sus tijeras, una silla y
su Código Penal. Grimaldino había enloquecido.
Luzdena trabajó valientemente para salir adelante, a la vez que buscaba a
Grimaldino a quien después de tanto esfuerzo logró rehabilitarlo, con la ayuda
de algunos doctores “… Salió del nosocomio casi marchando, al compás de un
silbido alegre, como si se hubiera propuesto borrar los rastros sangrantes que
hubimos dejado.